Semillas de marihuana Sherb Biker de Karma Genetics es una variedad completamente nueva de esta élite de la empresa de semillas holandesa.
Como quizás sugiere su nombre; Sherb Biker se deriva de un fenotipo seleccionado de Sherb IX (Gelato # 33 x Sunset Sherbet) de la selección personal de Karma. Luego, la Sherb IX se cruzó con su siempre confiable Biker Kush para crear Sherb Biker, un híbrido de dos increíbles variedades de cannabis.
Los cultivadores que operan legalmente pueden esperar plantas prolíficas y bien estructuradas con tiempos de floración de entre 9 y 11 semanas. La presencia del Gelato # 33 en la genética le da a las flores una hermosa coloración verde púrpura que se ve aumentada por un asombroso perfil de terpenos en capas con frutas cremosas, bayas y un pungente crudo y funky.
Sherb Biker es una variedad potente con rendimientos medios a altos en condiciones de prueba legales. Su potencia, sabor y aromas la convierten en una opción ideal para artistas de extracción legal.
- Marca Karma Genetics
- Tamaño del paquete 12 semillas por paquete
- Interior / Exterior Interior / Exterior
- Tiempo de floración 9-10 semanas
- Genética híbrida
- Linaje Sherb IX x Biker Kush
- Rendimiento medio a alto
- Tipo de semilla Regular
Preguntas frecuentes sobre cepas
¿Desafíos de Sunset Sherbet?
Según se informa, la Sunset Sherbet prospera en interiores y exteriores, pero es relativamente difícil. Se dice que se necesita experiencia para alcanzar el máximo rendimiento y potencia. La mayoría espera rendimientos superiores a la media y resistencia al moho y las plagas gracias a su floración de 8 a 10 semanas y su cosecha de finales de septiembre a principios de octubre.
¿Qué terpeno potencia el sabor a bayas?
El mirceno añade una dulzura parecida a la de una baya y un matiz almizclado y terroso. Su presencia crea ricos sabores de bayas de múltiples capas con una dulzura y profundidad que combina con aromas frutales genuinos.
¿Cómo manejan las semillas de cannabis regulares las plagas y enfermedades?
Algunas cepas regulares tienen una defensa incorporada contra plagas y enfermedades a partir de generaciones de adaptación a sus hábitats particulares. Esta resiliencia innata puede significar que se puedan utilizar menos productos químicos y hacer que la agricultura orgánica sea más práctica.